Vivir en una Isla, es algo que muy pocos pueden, pero ¿es una suerte?, todo depende de muchas cosas;
El tiempo en general muy bueno pero un par de días mas de frío al año y lluvias que mojen la tierra, no las que dañan, no vendría mal, poder ver esos colores que vemos cuando salimos del archipiélago, colores de estaciones, donde se disfrutan de olores de bosques grandes.
La tierra, cada día mas escasa, los bosques han pasado a ser bosques de ciudad, donde se han cambiado las hojas verdes por cemento muerto, llenos de avaricia y de rencor. Tierra que nos da la vida, pero que ahora es una sombra que cada día que pasa es mas oscura.
El mar, lo mas importante para los isleños, ya que vivimos de él, nos da alimentos, nos refresca la isla y a nosotros mismos, nos da playas, que empiezan a desaparecer por cemento. El mar azul, cada día mas contaminado, cada día con menos pescado, cada día mas olvidado.
El cielo de este archipiélago, tan demandado para estudios científicos y tan envidiado, por tener noches sin luces sino como es en su inmensidad, con su poderío y profundidad. Empieza a ser un desecho, la contaminación lumínica llega ya a esos lugares donde se estudian preguntas que todavía no tienen respuestas, pero importantes para la humanidad, por lo que inversiones millonarias se destinan a otros lugares, que son todavía paraísos del cielo.
Los políticos de la tierra, gente que no respetan a sus votantes ni a su propia tierra, donde ven riquezas en la venta de tierras y en la muerte de plantas y animales. Mentirosos que dicen traer dinero a las islas, para todos, que al final se quedan en los bolsillos de ellos y sus amigos. Esta lacra de la sociedad ha destrozado el encanto de un Archipiélago, que era un Edén, para aquellos de fuera que disfrutaban de bellezas de la naturaleza y para los isleños, los cuales están de acuerdo con el crecimiento pero con un crecimiento sostenible y justo para todos, no solo para esa raza de ladrones.
La gente, sencillos, respetuosos, amables, amantes de las bellezas de las islas, estos son algunos de los adjetivos que nos describen en el pasado, pero esto ha cambiado, ahora hay que sumarles muchos otros, que a veces no son reflejo de esta sociedad que siempre ha sido de las mas solidarias con el resto de la gente y del mundo, como se ha comprobado. Pero nos olvidamos de convivir, del respeto, un ejemplo es lo de cederles los asientos a los mayores en los transporte públicos, ha desaparecido hasta lo ven raro cuando otros lo hacemos.
Las ciudades, unas llenas de vida como lo pueden ser La Laguna, Icod, Adeje, Las Palmas, Maspalomas, ciudades donde la cultura y el ocio, no son problemas para la convivencia de los isleños y de los que no son isleños. Y otras ciudades muertas como lo es Santa Cruz de Tenerife, de la que los propios políticos venden humo día si y día no. Donde todo ha desaparecido, comercios, ocio y sus propios inquilinos.
Auditorios, importantes en las Islas grandes, donde luchan para ver cual es el mas bonito, cual trae las mejores obras o los conciertos mas importantes, pero con una premisa, todos tienen que ser caros e imposible para los ciudadanos que han pagado su construcción, con sus impuestos y que prefieren y reclaman mejores hospitales y centros sanitarios, lo mas importante es la salud.
El deporte, en las islas se ve de diferente forma, en Las Palmas, en todo los lugares intentan facilitar lugares donde ejercer el amor por no ser sedentarios, con instalaciones en cada barrio, en cada parque, en cada lugar, pero en otras ciudades como Santa Cruz, debes pagarlo y sino debes ir lejos para practicarlos, con lo que eso conlleva, coche con colas larguísimas, pitas y gritos, al final mejor que no.
Comercio cercano???, una gracia que me hace, cuando antes lo reventaron con la entrada de las grandes superficies, es ahora cuando las ventitas han vuelto a surgir por que la población las necesita, pero pagaron y pagan demasiado, se asfixian porque los políticos no ven, que en canarias están los sueldos mas bajos, una de las cesta de la compra mas cara y los ladrones mas buscados de España.
Estas son solo unas cuantas cosas para la reflexión de si tenemos suerte en vivir aquí, como indica una conocida marca de cervezas, que no es isleña, "Que suerte vivir aquí". Son puntos de vista de un isleño cansado de ver como seguimos en errores y mas y mas, y no salimos adelante.
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